Experiencias de la bolsa: teorías y riesgos


En 2020, con la pandemia, comencé a pensar si debía lanzarme a publicar mi contenido. Mientras escribía y buscaba nuevas historias, la cuarentena eterna había llegado. Con ella la gente necesita consumir contenido digital, y yo me había inscrito a una capacitación de Environment Artist.

Ya me había animado a llevar dinero a la bolsa, por suerte. Mi primera inversión fue COME (luego la vendí, ahora me arrepiento), había puesto menos de $100 (pesos argentinos), pero lo importante fue la lección aprendida, con menos de 30 años creo que es importante aprender a cuidar el patrimonio.

Durante el transcurso del año, fue difícil encontrar formas para no perder dinero. Mis hipótesis, relacionadas al dólar o la inflación, se convertían en polvo frente a la crueldad de las parábolas matemáticas (a ver, en teoría son parábolas, pero si las miramos históricamente, parece el trayecto de las misiones Apolo, pero eso es otra historia).

Mi hipótesis es simple, necesito una forma de invertir o preservar el capital, frente a las futuras devaluaciones y aumentos impositivos, en pocas palabras necesito un rendimiento, mayor al 8% mensual.

Esto no solo me preparó para ahorrar, salir de los plazos fijos y buscar alguna alternativa más rentable, sino que me sirvió para comenzar a entender y poner en práctica lo que había aprendido, a los 16 años, cuándo leía economía por hobbie.

Las empresas que cotizan en bolsa, son lo que aspiro a crear, un holding internacional. Un gigante tecnológico. Con lo cual leer la sección de inversión, en la página web de cada empresa, puso en práctica lo poco que había aprendido, de hecho comencé a necesitar aprender más sobre finanzas empresariales internacionales, macroeconomía y análisis técnico.

Lo que se suele decir en las plataformas digitales, es a mi juicio, el átomo de la punta del iceberg. Porque requiere entender los proyectos de cada empresa, leer los anuncios y realizar un seguimiento, además de adelantarte a las necesidades, los cambios en los commodities y diversificar el portafolios, para terminar con un resultado positivo a final del mes.

Mi hipótesis de llevar el dinero a la bolsa y trabajar, mientras realizo trading para conservar el capital, estaba comenzando a flaquear.